Noemí Salazar ha hablado por primera vez después de un año de las graves consecuencias que tuvo que afrontar tras someterse a una abdominoplastia y liposucción. Una intervención por la que visitó el quirófano en más de una ocasión por complicaciones. La influencer se sometió a está operación para corregir un problema de diástasis. Sin embargo, la complicación llegó por no seguir correctamente las indicaciones del postoperatorio. "Me hice la abdominoplastia y liposucción en Valencia y entonces me vine a Madrid. Error mío de venirme tan pronto porque me vine con los drenajes", ha explicado en sus redes sociales. Tras esto, a pesar de que iba a los masajes correspondientes para drenar los líquidos retenidos tras la operación, la que fue concursante de GH VIP ha revelado cuales fueron las secuelas: "He tenido un agujero así en mi tripa y eso no cerraba ni para atrás". Sin embargo, la hija de Raquel Salazar no asume toda la culpa de esta situación, según ha contado, cayó en manos de una mala especialista. "Ella me quitó el drenaje, pero me lo arrancó. ¿Qué pasó? Ese agujero se me empezó a abrir por el drenaje", ha explicado. "Yo tenía que ir todos los días a hacerme los masajes y que me lo drenaran, pero ella me lo drenaba hacia delante. Me mandaba todos los líquidos  hacia la cicatriz. ¿Qué pasa? Una cicatriz, más líquido, se abre". Tras varios meses en la misma situación, Noemí Salazar ha concluido agradeciendo a su nueva masajista. "Ella ha sufrido conmigo, ha llorado. No dormía por las noches porque como bien habéis visto el agujero era importante", ha agradecido, tras haber conseguido cerrar la herida gracias a ella, finalmente.