El presidente de EEUU, Donald Trump, ha avisado este martes de que la Unión Europea podría recibir en "uno o dos días" una carta que recogerá el plan arancelario estipulado. "Están siendo muy amables con nosotros, y veremos qué pasa. Probablemente estamos a dos días de enviarles una carta. Estamos hablando con ellos. Solo quiero que sepan que una carta significa un trato", ha asegurado el mandatario en una rueda de prensa. Desde Bruselas habían trasladado el mensaje de un "principio de acuerdo" tras la conversación mantenida entre la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y Trump. En este sentido, las negociaciones se han intensificado en los últimos días de cara a llegar a un entendimiento entre ambos bloques. El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, había asegurado este martes avances en las negociaciones entre el representante comercial de Estados Unidos, Jameson Greer, y el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic. Precisamente, Sefcovic ha optado por la prudencia tras pedir "estar preparados para todos los resultados". El bloque comunitario ha elaborado un listado de productos a los que podría imponer aranceles por si fracasan esas negociaciones. Las conversaciones se han convertido en un foco de incertidumbre, que ya se ha trasladado a la actividad económica, según ha admitido el comisario de Economía, Valdis Dombrovskis, quien ha instado a acercar posturas "lo antes posible". Trump estableció a principios de esta semana una prórroga hasta el próximo 1 de agosto frente al 9 de julio estipulado inicialmente como fecha límite para levantar la moratoria arancelaria anunciada el pasado 2 de abril bajo el denominado 'Día de la Liberación'. Horizonte temporal en el que también se incluye la UE. Sobre este punto ha comentado que no ofrecerá ninguna extensión del plazo adicional para que los países comiencen a pagar los denominados aranceles recíprocos. "Los aranceles comenzarán a cobrarse el 1 de agosto de 2025. No ha habido ningún cambio en esta fecha, y no lo habrá. En otras palabras, todo el dinero será exigible a partir del 1 de agosto", ha escrito el mandatario estadounidense en su plataforma 'Truth Social'. Trump empezó a notificar a una docena de socios comerciales las nuevas tarifas. Entre ellos figuran Corea del Sur y Japón, que han sido castigados con un 25%. A estos se suman Kazajistán y Malasia con otro 25%, porcentaje que se eleva al 30% en el caso de Sudáfrica y al 40% en Myanmar y Laos, a los que ha advertido de tomar represalias si deciden responder. Trump señaló en un primer momento que el citado 1 de agosto "no era 100% firme", insinuando que podría cambiar la fecha si hubiera más concesiones. Esto alimentó el escepticimismo en Washington y en Wall Street acerca de si el presidente cumpliría sus nuevas amenazas. La administración estadounidense solamente ha ultimado pactos comerciales con Reino Unido y Vietnam, cuyos detalles clave aún no han trascendido al mercado, y ha conseguido una tregua con China para reducir tasas impositivas. Todo ello a pesar de que apostaba por mantener negociaciones simultáneas con una docena de socios. En el marco de la sexta reunión de su gabinete desde su llegada a la Casa Blanca, Trump ha avanzado un arancel del 50% al cobre y se abre a estudiar otro de hasta el 200% para los productos farmacéuticos si sus fabricantes no se instalan en Estados Unidos. Si bien ha evitado ofrecer nuevos detalles al respecto, ha precisado que sigue una línea similar a la aplicada para el acero y el aluminio. "Les daremos aproximadamente un año y medio, para venir. Después se les aplicarán aranceles si tienen que traer productos farmacéuticos, medicamentos y otros artículos. Se les aplicará un arancel muy alto, de aproximadamente el 200%", ha dicho tras criticar qu elas administraciones anteriores permitiesen la deslocalización de la industria.