Carlos Alcaraz vuelve hoy a la pista en Wimbledon para enfrentarse en la segunda ronda del Grand Slam de hierba ante nada más y nada menos que Oliver Tarvet, un joven universitario procedente de la previa que está haciendo historia en el torneo de sus sueños y que deberá renunciar a un premio de 115. 000 euros. A sus 21 años —uno menos que Carlitos—, el joven británico con ránking 733 del mundo dio la campanada en el gran torneo de su casa al superar tres duros partidos de previa para alcanzar el cuadro final: Terence Atmane (rank. 126), Alexis Galarneau (rank. 210) y Alexander Blockx (rank. 144). Más aún sorprendió un joven que apenas había disputado un par de partidos profesionales en toda su carrera al ganar también su primer partido de cuadro final ante el suizo Leandro Riedi por (6-4/6-4/6-4). El triunfo le ha valido para alcanzar otro gran premio, la oportunidad de medirse a Carlos Alcaraz, segundo mejor jugador del ránking y reciente campeón de Roland Garros, ante su afición. Pero, como es evidente, no todo queda ahí. La clasificación para el cuadro final le reportó un premio de con 66. 000 libras (77. 000 euros) y esa victoria en el primer partido de cuadro elevó dicho premio económico a los 115. 000 euros. . . un montante que podría cubrir todos los gastos de un curso entero como profesional. Pero no. Y es que su historia se ha hecho viral estos días debido a que, al pertenecer al programa de la NCAA, la asociación que regula los deportes universitarios en Estados Unidos, las normas de dicha organización no permiten a sus deportistas embolsarse más de 10. 000 dólares anuales, unos 8. 500 euros al cambio. Es decir, que de los 115. 000 que ya ha gando por méritos propios, tendrá que renunciar a 106. 500 euros. . . una verdadera lástima para un joven que podría ayudarse de ese montante para financiarse los viajes a torneos a los que un jugador de su nivel no puede acudir por cuestiones económicas. "Sé que ha habido quejas sobre esto en el pasado y no quiero decir mucho y pasarme de la raya", dijo al respecto Tarvet, estudiante de la Universidad de San Diego. "En mi opinión, he trabajado mucho para conseguir este dinero. No creo que sea algo no merecido. Sería bueno que hubiera un cambio en las reglas de la NCAA, pero tampoco quiero involucrarme mucho en esto porque no creo que sea mi trabajo. Pero por lo que he hecho esta semana, creo que merezco ese dinero", añadió. Tal y como informó esta semana la agencia EFE, no es la primera vez que ocurre este tipo de situaciones con tenistas norteamericanos o adscritos a una universidad estadounidense. Maya Joint, Andy Roddcik , Reese Brantmaier o Fiona Crawley ya padecieron el resultado de esta norma en el pasado, una regla que, de ser contravenida, puede implicar la expulsión de la universidad. Más allá de esta cuestión, Tarvet sabe que tiene la posibilidad de hacer historia acabando con el vigente campeón del cuadro, misión compleja, pero ante la que no se amilana: "Vine aquí sin ninguna expectativa, estoy seguro de que puedo ganar a cualquiera y Alcaraz no es una excepción", dijo en rueda de prensa sin pelos en la lengua el joven aspirante.